los datos que usará la Anses para determinar quién no podrá cobrar el bono de $10.000

El Ingreso Familiar de Emergencia (IFE), el bono de la Anses por $10.000 que se pagará este mes, tiene por objetivo alcanzar a 3,6 millones de familias que vieron afectadas sus ingresos por el parate económico que genera la cuarentena obligatoria. Sin embargo, hasta hoy más de 10 millones de personas se habían preinscripto para intentar percibirlo. La Anses entrecruzará datos de consumos con tarjeta, declaraciones de Bienes Personales, ingresos de familiares directos y hasta la propiedad de embarcaciones como elementos para descartar a quienes no deben cobrarlo.

Anses también excluirá a solicitantes del beneficio como resultado de una evaluación socioeconómica y patrimonial basada en el entrecruzamiento de datos de bases de distintos organismos del Estado, AFIP y el sistema financiero, entre otros. La entidad conducida por Alejandro Vanoli entenderá que no se configura la “situación de real necesidad” si el beneficiario o algún miembro de su grupo familiar cae dentro de una serie de supuestos.

Gastos con tarjetas de crédito o débito que superen en más del 70% de esos dos salarios mínimos, es decir que sumen más de $23.625. Otro motivo de exclusión es el de haber obtenido o disponer rentas financieras que totalicen un monto superior a $66.917 para el periodo fiscal 2018.

Lo mismo en caso de haber declarado ante la Dirección Nacional de los Registros Nacionales de la Propiedad Automotor y de Créditos Prendarios la tenencia de bienes valuados en más de $607.500 (1,5 veces el monto anualizado del inciso a), y/o la tenencia de bienes informados por la Administración Nacional de Aviación Civil, y/o la tenencia de embarcaciones.