Presentaron una denuncia penal en la Argentina para investigar al gobierno chino por un “genocidio virósico”

La presentación la hizo el abogado Alejandro Sánchez Kalbermatten, quien radicó la denuncia en la mañana del jueves en los tribunales de Comodoro Py 2002. No obstante, el abogado también notificó vía mail a la Corte Penal Internacional, con sede en La Haya, según precisó el propio letrado.

Ahora, será el juez de turno, por estas horas Rodolfo Canicoba Corral, que deberá evaluar si remite el caso a la oficina de sorteo para que se le asigne a otro magistrado o si realiza alguna diligencia previa. Si entiende que no debe intervenir, solicitará que se le dé “intervención directa de la Corte Penal Internacional mediante libramiento del respectivo exhorto diplomático internacional” para que se abra una causa penal que esclarezca si se creó un “virus contagioso y mortal”, si se lo encubrió y si se lo propagó «en forma oculta por todo el mundo, afectando la economía, la salud y la vida de los ciudadanos de los países directamente afectados, especialmente de la República Argentina”, sostuvo la denuncia.

En el escrito, Sánchez Kalbermatten repasó que “la situación pandémica se habría iniciado en un laboratorio de la localidad de Wuhan, República Popular de China, y se habría propagado mundialmente hasta afectar a partir –aproximadamentede- de febrero de 2020 a los ciudadanos de la República Argentina». Si bien existen otras teorías, incluso algunas que “enmarcarían la Pandemia en acciones bioterroristas de posicionamiento mundial estratégico, lo cierto es que el avance letal, inédito e inesperado del CoronaVirus a escala mundial ya registra 1.800.000 personas contagiadas y unas 130.000 mil muertes al 11/04/2020 desde aquel primer caso registrado en Wuhan, República Popular de China, siendo muchos los países afectados”.

La denuncia también citó un artículo del periodista Josh Rogin en el diario The Washington Post, que señalaban que «dos años antes de que la nueva pandemia de coronavirus volcara el mundo, los funcionarios de la embajada de Estados Unidos visitaron varias veces un centro de investigación chino en la ciudad de Wuhan y enviaron dos advertencias oficiales a Washington sobre la seguridad inadecuada en el laboratorio, que estaba realizando estudios riesgosos sobre coronavirus de murciélagos».