e hizo efectivo este martes el aumento del precio de los combustibles de casi 8% en la Ciudad de Buenos Aires y de 7% en el interior del país y esto complica al sector agropecuario justo previo a que comience la cosecha de soja y maíz, los dos principales cultivos que alcanzan más de 23 millones de hectáreas sembradas en conjunto.
Según cálculos de Confederaciones Rurales Argentinas, este nuevo incremento de 6,40 pesos por cada litro representa 19.200 millones de pesos extra para el sector productivo (anualizando su incidencia)
«Es el cuarto aumento en menos de dos meses y medio, YPF sigue avanzando en su intención de financiar sus ambiciosos proyectos de inversión a través del aumento de sus combustibles, forzando así los precios de venta de un insumo sensible y esencial en las distintas cadenas productivas del país», reclamaron desde el entidad gremial.
Entre agosto de 2020 y febrero pasado las naftas ya se incrementaron 40%. Y en los tres primeros meses de 2021 la suba de los combustibles de las diferentes empresas promedia el 13%, dos puntos por encima de la inflación del período. Y se esperan nuevos aumentos en los próximos días hasta alcanzar el 18% en total, incluyendo esta última suba de hoy.
«Las subas de precios recurrentes, la actualización obligatoria trimestral por IPC del Impuesto a los Combustibles Líquidos, y el impuesto al dióxido de carbono, aumentan la presión fiscal recaudada con cada carga y es que, en algunos casos, el 47% de lo pagado en la factura de combustible son impuestos», apuntaron desde Cra.
Por lo que desde la entidad conducida por Jorge Chemes reclamaron que todo esto seguirá agravando la delicada situación de las pymes, erosionando las cadenas de producción y golpeando el poder adquisitivo, y el bolsillo de la gente. «Estos aumentos en la presión tributaria ya no se toleran más y queda de manifiesto cuando se analiza, que incide en cualquiera de los eslabones de la producción y el consumo», explicó.
En este sentido, apuntaron que sólo tomando este último aumento, el campo aportará anualmente unos adicionales 9.000 millones de pesos en concepto de impuestos.
